¿Y si un psicólogo fuera más importante que un analista para superar malas dinámicas?

En 'La lupa táctica' de esta semana, Rodrigo Hernando, entrenador profesional y analista, expone la importancia del rol de un psicólogo en los equipos profesionales, tan importante o más que analizar la estrategia o la técnica, sobre todo a la hora de gestionar las malas dinámicas durante la temporada

Diseño vía Fútbol Foral.

Es común escuchar hablar de las dinámicas en el fútbol. Muchas veces oímos comentarios del tipo: “Ese equipo está en estado de gracia”, “Están enrachados…” o, por el contrario, “Están gafados”, “No les sale nada”,... Comentarios que si analizamos vienen a exponer una situación de un equipo que lleva varias semanas con una misma tendencia, ya sea positiva o negativa. El problema viene cuando desde dentro de esos equipos se limitan a dejar que la tendencia cambie como por arte de magia sin profundizar en el problema y sin buscar soluciones a los errores que llevan a esas situaciones.

De nuestros equipos navarros, Osasuna Promesas esta semana consiguió una victoria que acaba con la mala dinámica que llevaban y les ha servido para salir del descenso, aunque en ese grupo de 1ª RFEF la clasificación está tan igualada que solo encadenar varios resultados positivos te pueden hacer coger aire con respecto al descenso y alejarte de la zona caliente.

Los representantes navarros de 2ª RFEF llevan dinámicas iguales: de sus últimos 5 partidos han conseguido 3 victorias, 1 empate y 1 derrota. Los tudelanos están empatados a puntos con el Utebo en lo alto de la clasificación y ya tienen 5 puntos con respecto al 6º, que es quien marca el playoff. Los de Mutilva están a 2 puntos del descenso y pueden tratar de mirar hacia la zona tranquila si consiguen alargar esta racha.

Esto de las dinámicas muchas veces no solo se limita a lo que los equipos nos muestran en el propio terreno de juego con sus tácticas y demás, se trata de estados de ánimo que consiguen que los jugadores jueguen con mayor confianza, que realicen acciones que muestren todo su potencial, y es aquí donde llega mi reflexión: ¿si hemos normalizado los entrenadores de porteros, los analistas, cuando vamos a normalizar que haya psicólogos en los cuerpos técnicos? Seguro que, si nos preguntamos a nosotros mismos sobre cuánto de importante es la táctica y cuánto la “cabeza” del jugador, podríamos llegar a otra profunda conclusión. ¿Por qué tenemos que priorizar el análisis del rival cuando a lo mejor sería más beneficioso analizar nuestro propio estado mental de cara a la competición? Y para ello que mejor que un especialista como lo es un psicólogo…